viernes, 3 de enero de 2014

tu piel


Donde van a parar las ilusiones?
Esos "te quiero" que salen del alma y caen en el mas escondido olvido, en una indiferencia austera y voraz !
Esas espinas que como cuchillas atraviesan el corazón ya duro de tiempo latiendo, de noches de soledad...
Donde te fuiste después de la amanecida?
Deseé no haber visto nunca jamás ese sol que nos separó, de repente, frío en los incipientes rayos del alba, mudos al calor de las campanas de una iglesia lejana, sordos de piar...
Donde se escondió mi certeza?
Esa que te dijo al oído secretos inconfesables, que te mimó en una distancia violada, que prometió estar por siempre, siempre, siempre...
Esta noche deseo que vuelva aquel primer beso, ese que no repetiremos, ese que, nervioso, angustiado, cohibido regalaste de tus labios a los míos...
Esta noche ya templada de Mayo solo busco tus ojos, pero tus ojos no están, no está tu mirada, no están tus manos, tu piel se ha ido, tu piel...se ha ido tu piel

Inma Castrejón, la bruja de chocolate

jueves, 2 de enero de 2014

ME COMÍ LA PALMERA

Hoy me he comido una palmera... Si, he sido yo, me la comí enterita. No era una palmera de huevo, ni de chocolate, ni de crema, era una palmera de madera, de 20 metros de alta.
Hoy he tenido los nervios nerviosos y la sensación de que algo iba a ocurrir. He pasado el día al teléfono, contestando mensajes de watsup, de Facebook, emails, contactando con gente, bordando trapos, intentando no acordarme de que solo tengo un mes para el fin del mundo y...para postre, una palmera.

Al caer la tarde me dí cuenta de que para cenar me quedaba un trozo de pescado de hace una semana, un cartón de huevos vacíos y un culito de mayonesa. Pan, cero, picos, no, pasta...no me apetecía comer macarrones con sigo mismo, así que me dirigí a mi coche a hacer un poco de gasto en alimentación básica, dicese, chocolate, bollitos, hamburguesas y demás chucherías.

Suelo llevar a mi perra en el coche para que me haga compañía, así ella no se aburre en casa y se da un paseo.

Llegué al super, le dije a mi perra que ahora vengo, cerré la puerta y me perdí durante media hora en el inmenso comercio en busca de las mas suculentas golosinas procurando no mirar el número de calorías en los envases. 

Cuando al fin pagué mi compra había pasado casi una hora. Mi perra esperaba paciente sentada en el asiento del copiloto respirando. Me senté dispuesta a poner en marcha mi vehículo. Los cristales estaban empañados del contraste de temperatura. Mi perra me miraba, yo la miré, arranqué, metí primera, segunda, semáforo rojo, semáforo verde, primera y giro el volante a la izquierda mientras acelero como si dieran la salida en una carrera de ralies, palmera, palmeraaa, palmeraaaaa....

Me comí la palmera!!!!

Los conductores de los coches contiguos se reían como locos de ver la forma tan estúpida d romper un coche, no podía salir de el puesto que el golpe chafó la puerta y acto seguido me dio un ataque de risa del que aún no me he recuperado.

Juro por dios que desde la fiesta de fin de año no he probado ni una gota de alcohol, ni tan siquiera he limpiado los cristales con líquidos peligrosos ni he consumido ningún tipo de droga legal o ilegal.

He fastidiado mi coche, pero os puedo asegurar que en este año no me había reído tanto!

No se a que viene esto de contar lo de la palmera, pero me parece que es muy gracioso, es mas, no puedo parar de reir aún y hace de esto mas de 3 horas!!!

Muy buenas noches, a ver si puedo dormir

Inma Castrejón,la bruja de chocolate